27 enero, 2009

Me repito como el ajo, pero...

... me da absolutamente igual.
Damos asco, somos repugnantes y cada día soporto menos convivir con las bestias que se llaman humanas y que sólo apestan a cobardía y egoísmo.
Hoy en el metro, mi parada, me subo y no hay sitio libre. Me apoyo en la barra y me pongo a leer. A la que se cierran las puertas, aparece una mujer ciega que coge el metro todos los días. Hoy el vagón ha parado un pelín más adelante, así que la puerta no estaba donde debe. El conductor que la ve, y abre las puertas. La mujer que trata de entrar, y choca contra el vagón. Trata de buscar la puerta y no lo consigue. Una chica la ayuda a entrar y la mujer se apoya en otra barra. Todo esto lo cuento para dejar constancia de que la entrada al metro no ha sido precisamente discreta. Si yo, leyendo y con los cascos a tope me he enterado de todo eso, es por algo.
Pues bien, mi barra, en la que yo estaba apoyada (digamos recostada) estaba justo entre dos bancos de asientos. Curiosamente, los reservados. Curiosamente, los ocupados por ocho bestias infectas e inmundas. He pasado la vista por cada uno de los ocho animales, y todos han bajado la mirada, se han concentrado en su periódico gratuito, en su novela amorosa o en la roña de sus uñas. Pero ni uno solo de esos ciudadanos modelos, de esos amantes padres y madres de familia que pagan sus impuestos y van de dignos, ha tenido los cojones de mover su puto culo hinchado. Y ahí se ha quedado la mujer ciega, 9 paradas agarrada a su barra, porque ocho insectos estaban bien cómodos en sus asientos reservados. Da igual que les haya mirado a los ojos, da igual que mi cara expresara todo el odio y el asco que me provocaban en ese momento, todo el desprecio del que he sido capaz (y creedme, es mucho). Da igual que ante mi "Qué cojones tenéis todos" nadie se haya dado por aludido. Todos han agachado sus putas cabezas y ni uno ha movido el culo.
No sé de qué me asombro, esto mismo lo he visto en muchísimas ocasiones. Pero hoy estoy especialmente asqueada. No sé por qué, pero me repugna la especie a la que pertenezco. Quizá por volver a leer el Señor y estar centrada en un mundo en que todo es mejor, quizá porque de tanto leer sobre el comportamiento tan bueno y tan malo de los personajes, la miseria cotidiana de ocho asquerosos me golpea más profundamente en la boca del estómago. No sé por qué, pero sí sé que llevo toda la mañana sin quitarme esa escena de la cabeza, las caras de esos ocho seres, viendo entrar curiosos a la mujer ciega y como uno a uno han bajado la vista ante mi mirada y mi muda pregunta.
Quizá porque hay días en que nada terrible te ha pasado, pero precisamente por eso eres capaz de pensar, joder, si yo fuera ciega me gustaría que me trataran de otro modo, que bastante tengo ya encima... Pero no, mejor que los snobs viajen con el culo bien reposado, que si es ciega por algo será y seguro que se lo ha buscado...
Dios, qué asco damos.

26 enero, 2009

7 años

Pues sí, eso es lo que llevamos tú y yo a cuestas, 7 años compartiendo casi todo, alegrías, penas, broncas y momentos geniales. Y para celebrarlo, aunque con retraso, un fin de semana estupendo. Compras, Café Gijón, y dos días enteros contigo, que al fin y al cabo, es lo importante. Llevas en mi vida un cuarto de la misma, parece mentira, y lo mejor es que ya no puedo recordar casi ningún momento importante en que no estuvieras allí. Esperemos que pronto podamos conseguir eso que tanto anhelamos :). Feliz aniversario <3

19 enero, 2009

Y llegaron de los cuatro puntos cardinales...

Pues sí, del norte bajó Jesucristo Superstar. Del sur vino Er Nene. Del este la Kianeta y del oeste... bueno, del oeste no vino nadie, pero si hay que rellenar el hueco, ponemos a Dumo que, en el fondo, viene de allí :P.
Todo empezó el jueves, con un día caótico donde los haya, teniendo incluso que ir a clase. Teníamos que recoger al canario a las 21:30 del aeropuerto, y eran las 20:30 y yo seguía en clase, más aburrida que una mona... Pero bueno, a pesar de la nieve que ya se había marchado, y del terrible frío que hacía por la capital, el canario llegó sano y salvo :). Curiosamente, tiene la fea costumbre de venir a verme los días más fríos del año, y esta vez no iba a ser una excepción :p.
Llegamos a casa tarde, y cenamos un risotto que estaba tremendo!!!! Pero tremendísimo :D. El viernes tocó ir a currar, y de compritas por las tiendas de comics, que hay que aprovechar :D. Yo me compré un calendario del 2009 con imágenes de CdHyF brutales!!!! Increíble, la verdad...
Después de las compras y de currar un poquito más, nos fuimos a comer al restaurante nipo de siempre :). Buena charla, mejor compañía y unas cuantas risas a costa del dragón flameante hicieron de la comida lo más entretenido del día, jejejejeje. Aunque la pobre Kim quedó traumatizada :P.
Tras la comilona a base de sushi y gyozas (dios, soy adicta a las putas gyozas :S) fuimos a recoger a la Kianeta, que venía de zamparse lo suyo con unos colegas. Y aquí empezaba lo bueno, un fiestorro de comer y beber donde no sobró prácticamente de nada... de nada de bebida, porque comer, comimos poco, la verdad :P. Recuento de bajas:
- 1 botella de Bombay Sapphire (culpable!)
- Botella y media de Brugal (ni lo toqué, lo juro).
- 3 litronas Mahou (tampoco me di a la Mahou)
- 15 botellines de medio litro de Franciskanen (culpable! Mucho! Vale, no los quince, pero sí unos 8 o 9... :P).
Y realmente sólo bebíamos tres o cuatro... Un desparrame total, pero controlando, que no se nos subió ni nada. Aunque claro, creo que eso fue culpa de las patatas fritas :P.
Pues eso, llegamos en la tarde a mi casa, y tras diversas dificultades técnicas, comenzó la partida. Éramos 7, así que hubo leña para todos :P. Cenamos unas pizzas, que estábamos la mar de gochos, y a las 3 o así nos retiramos a mimir :D.
El sábado comenzó de la mejor manera posible, y como no podía ser de otro modo en Madrid :). ¡¡Con unos estupendos churros y porras!! :D:D:D. Los que pidieron asilo en mi casa pudieron disfrutar de las maravillas de la churrería de mi barrio. Brutal. Nos pusimos como el quicote, yo creo que por eso no cerdeamos más en todo el día... ¡¡no nos cabía!! :D
A la hora de la comida llegaron los dos que faltaban, comimos unas estupendas costillas a la miel con arroz, y re-comenzamos la partida, que era de lo que se trataba :). Sobre esta parte no hay mucho que se pueda contar, risas, cachondeo, marrones, vamos, lo de siempre. Diversión a saco y muy divertida :). Una de las mejores partidas que he jugado :D. De cena tuvimos la especialidad de la casa, pollo al limón con arroz y cebolla caramelizada... Vale, también soy adicta a esta receta, por dios, si es pura ambrosía!!!! Ahhh, y también cecinaca de León, recién traída y en un cacho taaaaaan generoso, que cuando abro la nevera la vaca aún me muge :P. Qué rica está, por dios (nop, no me gusta comer, sólo lo parece :P).
Terminamos también a las tantas y nos fuimos a dormir. El domingo madrugamos porque había que despedir ar Nene, y tras un desayuno a base de Donuts, él cogió un taxi y nosotros nos pusimos a recoger la casa. A la hora de comer, y tras acabar con los restos del pollo, que no eran muchos (¿he dicho ya que está delicioso?), la Kianeta partió también hacia el aeropuerto, y yo me quedé con mi partenere solita, recogiendo lo último y disfrutando de una tarde tranquila viendo Friends.
Vamos, que uno no se puede quejar de finde. Esta vez no hubo concierto de Heavy Metal, pero creo que tampoco estuvo nada mal :P.
(Para crónicas más divertidas, ver blog de Dumo, que escribirá... para febrero :P).

11 enero, 2009

Tokyo Blues

Hace unos días terminé de leer este libro, del escritor Haruki Murakami. Es un libro publicado en 1987, pero curiosamente, desde hace unos meses todo el mundo habla de él. Por eso lo compré, había oído y leído que era tan bueno, que un día que no sabía qué coger me lo compré. Y bueno, malo no es, pero tampoco es que sea una maravilla...

Lo primero que me sorprende es el título. Un libro que en todo el mundo se ha vendido como Norwegian Wood, aquí se tiene que llamar Tokyo Blues. ¿Por qué? Porque si no, toda esa panda de gilipollas locos por lo japonés sin ser capaces de entender absolutamente nada, no lo comprarían. Si pone Tokyo en la portada lo compran, sea lo que sea. Y así nos va, teniendo como superventas un libro que es, en el mejor de los casos, mediocre.

Y por qué digo esto... Bueno, es simple. Es un libro pretencioso. No sé si será una de las primeras obras del autor, pero se nota que trata de hacer algo y no llega. El retrato de la sociedad no estaría mal, si no fuera porque de propio exagerado pierde el interés. Las relaciones sexuales son absurdas y descritas de un modo bastante repugnante. No es algo directo como nos lo pretenden vender, es algo tratado con auténtico mal gusto, tratando de llegar a algo, como digo, y quedándose a mitad de camino. Y no soy una persona precisamente puritana en este aspecto. Pero sencillamente se puede saber escribir o no saber, y en este caso...

Luego, las relaciones personales también son esperpénticas, rallanas en lo surrealista. No niego que cosas así pasen, o personas como las descritas, pero francamente, leyendo el libro uno se pasa el rato pensando en Holden Caulfield, pero en versión nipona. En serio, es todo el rato igual, misma línea de pensamiento, mismo comportamiento... Nada novedoso, sólo una traslación en el tiempo y en el espacio de la idea de otro tío...

En resumen, no es un mal libro, de esos que recomiendas no leer a nadie. Tiene a su favor que es corto y se lee rápido. Y que mantiene la intriga por saber ciertas historias del pasado. Lamentablemente esto sólo nos engancha a los que tenemos una vena cotilla. Es decir, no es un libro que yo recomendaría para leer, no me ha gustado, y opino sinceramente que si ha tenido tanto éxito ha sido entre los otakus de mierda o los gafapasta estúpidos que mientras algo huela a intelectual, lo adoran aún sin entenderlo.

Para resarcirme, he comenzado mi lectura anual del Señor de los Anillos, muhahahaha. Los hobbits ya se han reunido con Merry y la conspiración ha sido desenmascarada :). En breve partirán los cuatro hacia Rivendel :)

09 enero, 2009

La nieve

Tantos días sin actualizar y hoy lo hago dos veces :). Y es que hoy está nevando en Madrid, lleva todo el día haciéndolo y no parece que vaya a parar en las próximas horas :). Y yo estoy encantada, he jugado con la nieve, he pisado la nieve y casi me mato en la nieve :P. Y encima está todo precioso ^_^. Os dejo un testimonio de mi plaza nevadita.

Se finí ( o C'est fini, como diría mi amigo leonino :P)

Bueno, pues hasta aquí han llegado. Las Navidades se han terminado, y un año más, he sobrevivido. Aunque tengo que reconocer que este año a duras penas…

Comienza un año nuevo, un año de cambios, en el que tengo que ponerme las pilas. Tengo que volver a ser yo, volver a ilusionarme con algo, con la carrera, por ejemplo. Tratar de sacar adelante al menos una de las dos y poder licenciarme en algo de una vez (que ya estaría bien a los 30…). Y, sobre todo, empezar a vivir mi vida, que empiece a ser realmente mía, sin tener que dar explicaciones, sin las ataduras que he sufrido hasta ahora. Ser feliz, o al menos dejar de lado esta amargura que me atenaza de un tiempo a esta parte, poder volver a respirar.

La Navidad ha sido terrible, pero, como siempre, los Reyes han compensado de sobra. Este año me han traído el mejor reloj del mundo :-), una pulsera chulísima, un colgante con una amatista negra y un portarretratos de lo más hortera. Del otro lado del mundo ha llegado un jersey chulísimo de Uniqlo y varias cosillas de comer, incluyendo cuatro refrescos gelatinosos Qoo!!!!! Y dinero, que siempre viene bien.

Ahora queda sufrir la resaca de las fiestas, como digo. Recuperarse y volver a vivir, poder volver a vivir y o pegarse un tiro que a veces es de lo que tengo ganas… O de coger la pipa y pegárselo a unos cuantos, mejor dicho. Toca pelear con exámenes, hipotecas, funcionarios… en definitiva, con la vida de nuevo.

Tengo la sensación desde que volví del viaje de estar anestesiada. Todavía estoy con jet lag, no he aterrizado, no he vuelto a la rutina, y ya va siendo hora, la verdad. Tengo que ponerme las pilas aunque las asignaturas de la carrera no me gusten, tengo que seguir currando aunque cada día soporte menos a los funcionarios, a mi compañera y a mí jefe. Y tengo que seguir, sobretodo, luchando por conseguir el mayor sueño de todos, poder vivir de forma independiente (más o menos :P), tomando mis propias decisiones y responsabilidades. Mandando a la mierda por fin a todos esos vampiros anímicos a los que toleras porque si no, a ver qué haces un sábado por la noche, diciendo un par de verdades que llevo dentro desde hace tiempo. Disfrutando, al fin, a mí modo.

Escribo este borrador en clase, no es un buen comienzo a eso de ponerse las pilas, lo reconozco… Pero al menos estoy en clase ¿no? Pues eso…